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España, nuestros visitantes y el Ajo
Manuel Medina. Fuengirola, Marzo de 2014
   



























    Muchos lo recordarán. Fue titular en prensa y no sólo en la prensa del corazón. Algunos medios "serios" se hicieron eco del entuerto: "España huele a ajo". Esta frase atribuida a Victoria Beckham causó enojo, pero creo que fue una magnífica campaña de publicidad para un producto tan nuestro. Incluso recuerdo como en una cafetería, una hermosa señorita -que dicho sea de paso, nada tenía que envidiar a la Spice Girl y esposa de David Beckham- solicitaba al camarero, con gracia y desparpajo "un dientecito de ajo para las tostadas de pan con aceite, que ni mi marido es futbolista ni yo diseñadora".

    En cualquier caso, el asunto quedó zanjado hace unos días cuando Vanity Fair, en su edición española, recogía una entrevista a Victoria Beckham en la que de forma tajante afirmaba que: "… jamás dije la frase ´España huele a ajo´, jamás diría algo que mostrara tan poco respeto y que, además, no tiene nada que ver con la realidad".

    Son muchos los residentes extranjeros y visitantes que en nuestro país se interesan no sólo por la gastronomía, sino por productos de los que adolecen en sus países de origen. Es por ello que aplaudimos la iniciativa llevada a cabo por Jani Nurminen, director de Restaurante Finlandés La Leona, para dar a conocer a la comunidad finlandesa en España este ingrediente tan nuestro. La "Jornada del Ajo" puso en valor una infinidad de platos en los que el ajo era ingrediente protagonista. Incluso un cremoso postre de helado de ajo podía ser degustado en un ambiente desenfadado con un formato de "islas gastronómicas" a las que acercarse para intercambiar comentarios con el personal de sala, que las atendía, y degustar la gran variedad de elaborados puesto a disposición de las muchas personas que durante esta jornada se acercaron a este restaurante afincado en la localidad de Fuengirola.

    Y no faltaron vinos, pues de forma gratuita sendos stands los ofrecían. Enrique Sánchez Kosfeld, miembro de la empresa distribuidora de vinos Qualité Selección y experto consultor y dinamizador de restaurantes, se ocupó de que el vino español en distintas variantes maridase con los platos de tan peculiar evento. Pero volvamos a nuestro querido ajo. De origen oriental, se cultiva en casi toda España. Las variedades más frecuentes son la blanca y la morada. No podemos dejar de mencionar -pues en el acto fue comentario recurrente- los poderes ocultos para ahuyentar vampiros que se le otorgaba en la Edad Media pues, según la leyenda, su olor les resultaba insoportable. El ajo es indispensable en los platos más representativos de la cocina española. El gazpacho, las humildes y sabrosas sopas de ajo, salsas como el alioli, cremas de pescado y marisco, vinagretas y escabeches, pescados blancos, verduras… Un ingrediente que no falta en nuestras cocinas y al que lo único que le podemos reprochar es su intenso olor, pero baste con eliminar el tallo central y asunto resuelto.

    En la Odisea, Homero nos narra cómo Hermes dio ajo a Ulises, de ese modo evitó que la cruel maga Circe convirtiera al héroe en cerdo, suerte que sí corrieron sus compañeros de aventuras. En la actualidad, en Egipto se celebra la fiesta de "aspirar las brisas" durante la cual el ajo se consume y es ubicado alrededor de los marcos de las puertas y sobre las repisas de las ventanas con el fin de combatir las fuerzas maléficas. En el Hinduismo, en el Islam, en el Talmud… las referencias a esta planta están presentes en todas las culturas y en muchas religiones y creencias. Pero sean cuales sean sus esotéricas propiedades hay algo que es incuestionable en el ámbito de la gastronomía: la "magia" de la cocina española tiene en el ajo a uno de sus mejores aliados y animamos a los restauradores a secundar el ejemplo llevado a cabo por Restaurante la Leona. Una forma estupenda de atraer clientes… ¡y ahuyentar vampiros!  

©Manuel Medina
Escritor y Viajero



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