Las Islas Baleares despuntan este verano en el intercambio de casas
Sábado, 12 de julio 2014
Una gran diversidad en las ofertas hace que las Islas Baleares se impongan como una opción contundente en el intercambio de viviendas
Con la llegada del verano comienza la temporada alta de turismo en el Mediterráneo. A pesar de la actual recesión económica, una forma de hacer frente a unas vacaciones costosas es el consumo colaborativo, que se presenta como una tendencia en alza, y que permite, además, una experiencia diferente y única. El primer portal de intercambio de viviendas perteneciente a la red internacional HomeExchange.com, IntercambioCasas.com, ha presentado sus datos de las casas registradas en las Islas Baleares, con 162 ofertas en 53 municipios.
Estas ofertas destacan por su diversidad y dejan atrás la idea del característico turismo de sol y playa. De este modo, los usuarios podrán elegir entre una casita en la costa, en una ladera con vistas al mar, o entre la ciudad o un pueblo típico balear. Además, también pueden encontrarse varias construcciones antiguas en el interior, que han sido restauradas y que ofrecen el encanto del entorno tradicional mallorquín. Según Violeta Díaz, directora de IntercambioCasas.com en España, "son destinos que atraen porque permiten combinar el descanso veraniego con el turismo cultural". Muchos socios destacan la oferta complementaria de deportes y actividades de ocio próximas a sus casas, así como la visita a los cascos antiguos o las festividades y gastronomía locales.
En cuanto a las preferencias de los socios baleares, muchos de ellos se decantan por destinos europeos, desde los países del norte hasta el calor de las costas griegas e italianas, sin dejar de lado Inglaterra, Irlanda, Alemania, Bélgica o Francia. Hay también quien opta por rumbos más exóticos y menos accesibles económicamente en el sector hotelero como Japón, Sri Lanka, Canadá, Estados Unidos, Brasil, Chile o Madagascar. Los más atrevidos, ya después de haber sucumbido al intercambio de casas en más de quince ocasiones, están abiertos a cualquier destino que se les proponga. Sin embargo, pocos de ellos se quedan en el territorio nacional.
