Antti Sarpila´s Hot Club en Rincón del Jazz, un viaje al swing
Manuel Medina. Benalmádena Costa. Marzo de 2015.
El muy reputado clarinetista finlandés Antti Sarpila hizo escala recientemente en El Rincón del Jazz, un lugar de referencia en la Costa del Sol que recibe a lo mejor del Jazz internacional.
En esta ocasión la formación Antti Sarpila´s Hot Club estuvo integrada por el propio Antti al clarinete, Ricky Vivar a la guitarra y voz, y Diego Suarez al piano. Un trío del que emanaba a borbotones el mejor y más puro swing que en mucho tiempo hemos oído. Por no sabemos que extraña razón o modismo este género del Jazz no está últimamente demasiado presente en el circuito de locales que brindan actuaciones en vivo. Y sin embargo hemos de afirmar con rotundidad y sin paliativos que pocos estilos tienen la capacidad que tiene el swing de llevar al paroxismo y a la exaltación tanto a los intérpretes como al público que vive -literalmente hablando, pues sólo el directo lo transmite plenamente- este grado de emoción.
Antes de que la luz se atenuase, observando la nutridísima audiencia, tuvimos por un instante la sensación de encontrarnos en el famoso Storyville Live Jazz Club de Helsinki. Tal era el número de finlandeses que asistía al evento. La mayor comunidad de finlandeses fuera de Finlandia se encuentra en España y prácticamente concentrada en un único lugar: la localidad de Fuengirola, colindante con la de Benalmádena Costa, que acoge al Rincón del Jazz. Tendíamos que viajar a California para encontrar la segunda, mucho menos numerosa. Se dieron por tanto cita residentes nórdicos seguidores de Antti Sarpila así como residentes extranjeros de la zona, junto a los muchos españoles que desearon disfrutar de la mejor de las experiencias gastronómicas junto al mejor Jazz de tan boreales regiones.
Antti Sarpila fue pianista en sus inicios, pero decidió abandonar este instrumento para abrazar el clarinete y el saxofón. En los años ochenta conoció a Bob Wilber, uno de los más importantes clarinetistas estadounidenses de entre los nacidos en los años 20 y discípulo del mismísimo Sidney Bechet. Junto a él completó Antti su formación y al poco tiempo marchó a EE.UU. La actuación de Antti dejó boquiabierta a los asistentes. Literalmente hablando. Los afortunados allí presentes tomaron conciencia de lo evidente: estaban ante un virtuoso del instrumento del que lo menos que se puede decir -y nosotros lo afirmamos con mayúsculas- es que es el más importante clarinetista del mundo en representación del estilo del genial Benny Goodman. Su discografía es apabullante, alcanzando más de treinta discos propios y en torno a cien grabaciones como acompañante de estudio. Músicos de la talla de Count Basie, Buddy DeFranco, Thad Jones, Wynton Marsalis, Buddy Haggard o Scott Hamilton recurren a él para sus actuaciones y grabaciones. Premio Louis Armstrong en 1996 y Premio Sociedad Yrjö en 1997 por la Unión de Jazz finlandesa, Antti es un hombre incansable que perpetúa desde hace más de veinte años una gira interminable por Europa, EE.UU., Oriente Medio, Australia y Rusia. Todo un regalo el que Manrique Busto, gerente del Rincón del Jazz, ha brindado a los amantes de la música residentes en la Costa del Sol al lograr traer hasta aquí a tamaña figura.
Pero los genios siempre se rodean de genios. No puede ser de otro modo. Antti Sarpila estaba escudado a su derecha por la guitarra y la voz de Ricky Vivar. Y si Antti deja claro ser la reencarnación musical de Benny Goodman, Ricky Vivar no se queda atrás: basta cerrar los ojos para oír entre sus acordes -no exentos de marcada personalidad propia- las notas del gigante de la guitarra Django Reinhardt. Y a la izquierda de Antti Sarpila el malabarista del teclado Diego Suárez. Pianista de formación clásica y profesor en el Conservatorio de Málaga participa en diversas formaciones de jazz. Su estilo es fácilmente reconocible, pues el virtuosismo lo alcanza al ejecutar notas y acordes imposibles pero que se hacen realidad en el estilo Harlem que lleva a cabo. El "stride piano" o estilo Harlem es un estilo pianístico de jazz que se popularizó en los felices años 20. En este barrio de Nueva York la evolución del ragtime llevó a los pianistas a hacer movimientos con la mano izquierda al tocar mediante los que se alternaban notas potentes en los tiempos débiles, con acordes en los tiempos fuertes. Todo un lujo el que Diego Suarez nos brindó. Y ya de que paralelismos hablamos al analizar a sus compañeros de trío, en su caso no hay que hacer demasiado esfuerzo para oír como su piano navega de forma sublime entre los estilos de Teddy Wilson, Fats Waller y Art Tatum, que no es poco.
Un viaje musical el llevado a cabo en Rincón del Jazz cargado de swing, de tempos rápidos, de riffs melódicos con crescendo, de registros altos -altísimos- en el clarinete, y sobre todo de un ritmo que obligó a músicos y asistentes a mover de forma frenética algunos de sus pies. Tras la actuación y el capitulo de felicitaciones, las luces se apagaron… y el local se cerró. Una actuación casi perfecta. Si, faltó algo. Faltaron bailarines negros luciendo brillantes zapatos bicolores de charol y ejecutando acrobáticas y espectaculares coreografías, faltó que el amanecer sorprendiese a los músicos aún arrancando desgarradoras notas a sus instrumentos. Faltó, en definitiva, que estuviésemos en el Harlem de 1920. Es lo único que no logró el Rincón del Jazz… todo lo demás sí.
Rincón del Jazz
Plaza de la Iglesia, Arroyo de la Miel - Benalmádena
www.rinconasturiano.com
info@rinconasturiano.com
Telf.: 952567628
© Manuel Medina
Escritor y Viajero
